viernes, 7 de noviembre de 2008

Schuster iniciará una terapia de grupo del vestuario blanco

Schuster no analizará el partido de la Juve (0-2) con su plantilla hasta el viernes. El técnico alemán no quiso hacerlo el jueves porque considera que es preferible esperar al menos 48 horas para que los ánimos se calmen y así profundizar más en los errores que se cometieron frente al equipo italiano.

Schuster no quiere que estas reuniones se tomen como una reprimenda después de una derrota tan dura como la del miércoles y por eso deja que la cosa se enfríe antes de afrontar la denominada terapia de grupo. El entrenador sabe que los más fastidiados por esta situación son sus futbolistas, que lo intentaron todo y pusieron el alma sobre el terreno de juego.

Es algo que además recalcó durante la rueda de prensa posterior al partido. Nada de reproches y sí buscar soluciones después de una jornada aciaga, aunque Bernd insiste en que su equipo en ningún caso mereció la derrota.

El jueves sí dialogó individualmente con algunos de sus jugadores. Fue una manera de empezar a reforzar psicológicamente a futbolistas que quedaron muy tocados en la noche europea. Schuster quiere dar la vuelta a esta situación e inculcarles que sólo fue un tropiezo, pero que no hay nada perdido y la clasificación sigue dependiendo exclusivamente de superar al Zenit en el Bernabéu.